Ante el anuncio de un Decreto que aumentará el permiso de paternidad
El Gobierno ha anunciado el pasado viernes su intención de aprobar esta semana un decreto ley que aumentaría el permiso de paternidad a 8 semanas en 2019, a 12 en 2010 y a 16 en 2021, año en que los permisos llegarían a ser iguales, intransferibles y pagados al 100%.
La PPIINA celebra que el Gobierno vuelva a reconocer la necesidad urgente de equiparación de los permisos. Después de tantos anuncios y tantas votaciones unánimes en el Congreso de los Diputados a favor, ya es hora de que se haga realidad el derecho de los padres a cuidar en igualdad con las madres.
Sin embargo, si se aprueba tal como está el borrador entregado a los agentes sociales, no será equiparación por mucho que la llamen así, porque las madres seguirán cuidando a sus bebés más que los padres y durante mucho más tiempo. En este vídeo lo explicamos (aunque el vídeo se refiere a la Proposición de Ley de Igualdad Laboral del PSOE, el borrador del Decreto traslada dicha PL en lo que se refiere a los permisos).
En primer lugar, el borrador prevé que las seis primeras semanas tendrán que ser simultáneas a partir del nacimiento (como lo son ya las actuales 5 semanas). ¿Por qué esa restricción? ¿Por qué obligar a todo el mundo a simultanear 6 semanas, en vez de simplemente permitir que quien quiera lo haga así y quien no quiera se pueda turnar para alargar el tiempo de cuidado del bebé en casa? Si se aprueba el borrador como está, las madres seguirán siendo las cuidadoras principales en cuanto estén recuperadas del parto, mientras que los padres seguirán reducidos al papel de «ayudantes» y se verán sometidos a las presiones de la empresa para seguir conectados a su puesto de trabajo “porque ya está la madre para ocuparse del bebé”.
La PPIINA reclama: ¡permitan a las parejas turnarse el máximo de tiempo para alargar lo más posible el periodo de cuidado en casa! ¡Cambiemos de una vez el modelo del hombre ayudante por el del padre corresponsable!
Además, el borrador no incorpora la actual condición de que, para tomarse el permiso a tiempo parcial, haya que trabajar el resto de la jornada, a pesar de la insistencia de la PPIINA al respecto. Nos parece muy importante porque, si esa condición desapareciera ahora, las mujeres se verán presionadas a reducir jornada y a quedarse todo el día en casa prolongando el permiso al doble con la mitad de la paga, mientras que los hombres tenderán a tomarse el permiso a tiempo parcial pero trabajando la otra mitad del día, sin desconectarse de la empresa. Otra trampa para perpetuar el modelo del padre “ayudante”, no corresponsable. Otra trampa para mantener la discriminación de las mujeres en el empleo. Así ha pasado ya en otros países. ¡Pero aún estamos a tiempo de que esa condición figure en el Decreto!
Por otro lado, el Decreto debe dejar claro que el permiso a tiempo completo o parcial es un derecho de la persona trabajadora, lo que el actual borrador no hace, pues establece que el permiso se puede tomar «en régimen de jornada completa o a tiempo parcial, previo acuerdo entre la empresa y la persona trabajadora, y conforme se determine reglamentariamente«.
El diseño de la PPIINA está claro: queremos unos permisos que permitan a los padres cuidar en igualdad con las madres (en este vídeo de dos minutos lo venimos explicando desde hace mucho tiempo). Pero, como habíamos avisado, el diablo está en los detalles: señora Ministra de Igualdad, señora Secretaria de Estado de Igualdad, hagan honor a sus cargos y ¡retiren del Decreto esas trampas que impedirán que los padres se queden al cargo de sus bebés el mismo tiempo que las madres en el primer año!
La PPIINA sigue esperanzada en que los permisos igualitarios se hagan realidad. Pero estaremos pendientes de los detalles para que esta no sea una reforma que, aún con apariencia igualitaria, siga propiciando de forma encubierta la desigualdad en el cuidado.
Ojalá el Gobierno cambie esos detalles y, en vísperas del 8 de Marzo, nos dé la gran noticia que el movimiento feminista reclama con fuerza.
¡Compañeras, hasta la victoria! ¡Viva la huelga feminista del 8M!