Muchas personas se estarán preguntando: ¿Cómo es posible que, con la que está cayendo, aún haya una plataforma que reivindique ampliación de derechos? Cuando se están desmantelando los servicios públicos de salud y de educación; cuando se liquidan derechos laborales básicos; cuando el derecho al aborto se cuestiona antes de estar garantizado; cuando se reducen las prestaciones de desempleo y las pensiones… ¿no hay cosas más elementales por las que luchar?
Efectivamente, en esta catástrofe económica y social que estamos viviendo, la reivindicación de permisos iguales, intransferibles y pagados al 100% puede aparecer como un lujo. Sin embargo, esa apariencia no es más que parte del espejismo en el que los poderes económico-financieros pretenden mantenernos.
La amenaza de la hecatombe a cortísimo plazo está siendo utilizada para introducir, además de recortes que aumentan el sufrimiento y profundizan la crisis, cambios estructurales de consecuencias irreparables; y todo ello sin debate ni justificación alguna.
Ante esta situación insoportable, la PPIINA se une a todas las fuerzas sociales que nos resistimos a esa perversa lógica antidemocrática y exigimos que se pongan en primer plano las necesidades de las personas, la protección de las familias, la recuperación económica y el desarrollo sostenible, tanto ambiental como demográfico.
Porque no es recortando las pensiones como se conseguirá la sostenibilidad, sino permitiendo que todas las personas tengan las criaturas que deseen; pues sin ellas no habrá ni pensiones ni futuro.
Porque la igualdad de derechos para el cuidado, junto con la universalización de los servicios públicos y otras medidas, es necesaria si queremos que las mujeres accedan al empleo en condiciones de igualdad; y que los hombres puedan ejercer sus derechos más elementales en relación con sus criaturas.
Porque condenar a las mujeres a abandonar sus empleos para cuidar es desastroso para ellas y para la sociedad: la familia tipo ‘sustentador masculino/esposa dependiente’ no solamente es la mayor trampa de pobreza sino que impide el desarrollo de las capacidades productivas y cuidadoras de todas las personas.
Por todas estas razones, La PPIINA forma parte del movimiento social de resistencia ante estos graves ataques al estado del bienestar. Afirmamos que, contra la crisis, la protección social y la igualdad es la salida. Continuaremos trabajando por una sociedad en la que todas las personas, hombres y mujeres, vivamos en igualdad y con plenos derechos, para cuidar, para trabajar y para vivir en libertad.
Tenemos sobrados argumentos para demostrar que la reivindicación de permisos iguales, intransferibles y pagados al 100% es necesaria y emblemática de esa otra sociedad que queremos. Por eso, más que nunca, ¡seguimos en la lucha!
Elena · sep 14, 05:32 · #
Enhorabuena por esta plataforma, sois justo lo que andaba buscando, porque pienso lo mismo. Añadiría a este interesante artículo 2 consideraciones mas:
– Que además de una mejor situación para madres y padres, los permisos iguales e instransferibles permitirían a los hijos disfrutar por mas tiempo del cuidado de sus padres, sin tener que ir demasiado pronto a la guardería, algo que, reconozcamoslo, violenta sus instintos y sus deseos antes de los 2 años o mas. Como los bebés no hablan, ni mucho menos votan, se relegan sus intereses mas que los de nadie en aras de la productividad.
– Al hilo de esto, si los permisos de maternidad y paternidad fuesen además menos irrisorios (un año para cada uno, para cumplir con la recomendación mínima de 1 año de lactancia materna), no está claro que esta medida fuese muy cara para el estado, porque aunque gastaría en permisos pagados, ahorraría en guarderías: los niños no tendrían que empezar la guarde hasta los 2 años, pues estarían cuidados por su familia hasta esa edad. Con un 60% menos de demanda, probablemente las guarderías públicas que ya hay bastarían para dar salida a las necesidades, y no haría falta construir mas.
¿Donde hay que apuntarse a esta plataforma?